Si te encontras con pan viejo en tu cocina y no sabes qué hacer con él más que desecharlo, aquí te presentamos una solución creativa y sabrosa: el bizcochuelo de pan duro.
Esta receta, transmitida de generación en generación por nuestras abuelas, te permitirá aprovechar al máximo ese pan duro y sorprender a tus seres queridos con un postre único y económico.
Cómo preparar un bizcochuelo con pan duro
Ingredientes:
5 o 6 panes viejos/duros (puedes utilizar cualquier tipo, incluso el lactado).
3 huevos.
250 cc de leche.
100 g de manteca o margarina (puedes sustituirlos por aceite).
3/4 taza de azúcar.
Esencia de vainilla a gusto.
Dulce de leche (opcional).
Azúcar impalpable.
Instrucciones:
Trocea el pan en pedazos pequeños y colócalos en un recipiente hondo. Puedes usar cualquier tipo de pan viejo o duro, siempre y cuando no esté verde.
Agrega la leche y un chorrito de esencia de vainilla. Mezcla con las manos para impregnar el pan y desmenuzar las partes crocantes hasta obtener una textura suave.
Incorpora los huevos batidos y la manteca/margarina derretida (o aceite). Revuelve hasta integrar todos los ingredientes y luego añade el azúcar de forma gradual.
Vierte la mezcla en una fuente para horno previamente engrasada y enharinada. Si lo deseas, puedes agregar unas cucharadas de dulce de leche por encima para crear un efecto marmolado.
Hornea el bizcochuelo a 180°C durante aproximadamente una hora, o hasta que la superficie esté dorada y cocida.
Una vez listo, retira del horno y deja enfriar a temperatura ambiente. Antes de servir, espolvorea con azúcar impalpable y decora con frutillas u otras opciones según tu gusto.